La fiesta alrededor de este árbol milenario, declarado Monumento Natural de Andalucía, nació tras el devastador incendio de 2004 para promover un foro de ideas donde expresar un modelo de desarrollo sostenible
Vecinos de Marigenta, Zalamea la Real y Berrocal han participado hoy en las VI Jornadas ‘Acebuche Milenario’, celebradas para concienciar de la importancia de la preservación medioambiental y promover un punto de encuentro para impulsar un modelo de desarrollo sostenible.
Esta fiesta, organizada por la Asociación ‘Amigos del Árbol’ en colaboración con los ayuntamientos de Zalamea la Real y Berrocal, la Diputación Provincial de Huelva y la Hermandad de San Pedro y la Santa Cruz de Marigenta, nació tras el demoledor incendio que arrasó la Cuenca Minera en 2004 y que afectó al término municipal de Zalamea la Real. El fuego bordeó la zona en la que se encuentra el árbol que consiguió salvarse de las llamas por lo que, un año después, los vecinos celebraron la primera jornada alrededor de él.
Este año la lluvia ha impedido que las jornadas se celebrasen en la finca ‘El Espinillo’, donde se encuentra el Acebuche, por lo que han tenido que trasladarse hasta el edificio multifuncional de la pedanía zalameña de Marigenta, donde se ha instalado una barra y se han celebrado los distintos actos del programa.
La inauguración ha corrido a cargo del alcalde de Zalamea la Real, Vicente Zarza, el alcalde de Berrocal, Juan Jesús Bermejo, la concejala de Cultura del Ayuntamiento zalameño, María de los Ángeles Pascual, el alcalde pedáneo de Marigenta, Isaías Carrasco y el miembro de la Asociación ‘Amigos del ‘Arbol’ Antonio Vázquez.
Zarza dio la bienvenida a todos los asistentes y les informó de las actuaciones que la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía va a acometer en la zona para proteger y poner en valor el Acebuche Milenario, declarado en 2005 Monumento Natural de Andalucía. Estas actuaciones incluyen mejoras en los accesos, mantenimiento del entorno y colocación de talanqueras para preservar este patrimonio natural zalameño. También comunicó que uno de los objetivos será incluir este espacio en la Red del Conjunto Dolménico de El Pozuelo y en la ruta del paquete turístico de la Cuenca Minera.
Por su parte, el representante de ‘Amigos del Árbol’ Antonio Vázquez habló de la importancia del Acebuche Milenario y dijo que “este árbol renació a partir del incendio de Riotinto ya que ahora lo vemos como un faro de vida en defensa de la naturaleza”.
Durante la apertura, se leyó un poema en homenaje al cohetero Manuel Castillejos y actuaron las alumnas de la Academia de Mª Carmen. También a lo largo de la jornada se rifó un cuadro de ‘El Acebuche’ realizado por el pintor zalameño Jesús del Toro cuyos fondos serán destinados a sufragar parte de las obras de reparación de la techumbre de la iglesia de Berrocal.
Por la tarde, los asistentes pudieron degustar una gran paella popular y disfrutar de la jornada de convivencia.
El Acebuche Milenario de El Espinillo tiene seis metros de perímetro de tronco medidos a 1,30 metros de suelo, doce metros de altura y 279,60 metros cuadrados de proyección de copa. El interior del árbol se encuentra hueco y el paso de los años ha provocado que el fuste se divida en dos hasta llegar a la peana, hecho que le confiere un aspecto aún más anciano. Estas mismas peculiaridades han provocado su inclusión en el Inventario de Árboles y Arboledas Singulares de Andalucía.