Por el pueblo

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domingo, 24 de octubre de 2010

Los trabajadores de la Mancomunidad cobran todos sus salarios atrasados

Los trabajadores y trabajadoras de la Mancomunidad de Cuenca Minera han recibido los salarios que se les adeudaba. La Federación de Servicio Públicos de UGT se ha congratulado de que las gestiones y movilizaciones que se han realizado al final hayan llegado a buen fin, "gracias también al talante e implicación del presidente de la Mancomunidad de la Cuenca Minera, Vicente Zarza Vázquez, de los propios trabajadores y del sindicato para resolver este grave problema".

Los trabajadores han anunciado que no bajarán la guardia porque esta situación que han vivido puede volverse a repetir, por ello también la FSP-UGT Huelva ha anunciado que no cesará en pedir una solución más estable de financiación para la Mancomunidad que garantice el pago de los salarios a las personas trabajadoras.

Según el sindicato, esta solución puede pasar por ligar parte de los fondos de nivelación de los ayuntamientos que componen esta mancomunidad, que serán aportados por la Junta de Andalucía, al pago de los salarios de la plantilla. Para ello, la FSP llevará a cabo en breve, una reunión con todos los alcaldes de esta mancomunidad.

Los trabajadores de la Mancomunidad Cuenca Minera han secundado varias jornadas de huelga para reivindicar los salarios de los meses de agosto y septiembre que les debía la Corporación supramunicipal, en total 160.000 euros.

La plantilla de 73 personas viene realizando diversas movilizaciones desde hace meses. Una vez que consiguieron que les abonaran el mes de julio, les han dejado pendiente septiembre, con lo que la deuda sigue siendo la misma.

UGT responsabilizó a los ayuntamientos de Nerva y Minas de Riotinto de la situación que vivieron los trabajadores de la Mancomunidad Cuenca Minera que han estado dos meses sin cobrar la nómina, julio y agosto.

El impago se debió a la falta de liquidez en las arcas de la corporación supramunicipal, que preside el socialista Vicente Zarza, también alcalde de Zalamea la Real. La situación se ha convertido en un círculo vicioso, ya que la mancomunidad se financia, en parte, de las aportaciones de los ayuntamientos. Estos se comprometieron en Comisión de Gobierno en junio de 2008 a efectuar unas aportaciones mínimas que al menos cubrieran los gastos corrientes de la entidad, aportaciones que no cubren con asiduidad.
Fuente: Odiel Información