“no es ni mucho menos una salida laboral ni me mueven ambiciones económicas. Hay que dar un paso al frente cuando ves ciertas cosas en el pueblo con las que se te abre el alma. Por ejemplo, el reparto del trabajo municipal es un desastre, no se les da opciones a la población, Zalamea está anclada, no se hace nada…..” esto lo decía Marcos García o mejor, Marcos Toti, como a él le gusta, nuestro Alcalde. Pero claro, lo decía antes de serlo, allá por el 15 de Mayo, como ni el mismo se creía que pudiera suceder, pues podía decir lo que le viniera en ganas. Y mira por donde sus palabras se vuelven contra él.
Otra de sus propuestas, en esa misma fecha: “IU ha elaborado un programa para todas las áreas, pero el empleo tiene que ser la principal baza”.
Empecemos pues, a demonstrar, como en tan poco espacio de tiempo deja de cumplir sus grandes iniciativas de su programa electoral. Es cierto que el cargo de Alcalde ocupa mucho tiempo, es cierto que su dedicación exclusiva debe estar remunerada y no es menos cierto, que cada candidato o componente de una lista electoral en una localidad como la nuestra aspire a ganar unas elecciones como salida laboral, como tampoco dudamos de que nadie se presente por pura ambición económica, hasta ahí podía llegar la broma.
Este incumplimiento de promesas, surge a raíz de los acuerdos tomados en el pleno celebrado el pasado 30 de junio, ya que se asigna un sueldo de 2.544,00 € en bruto al mes, con la abstención del PP y el voto en contra del PSOE, y que no tiene nada que ver con lo que él estaba ganando en el trabajo del que ha pedido excedencia, por mucho que la FAMP (Federación Andaluza de Municipios y Provincias) recomiende. Para conocimiento de todos/as, nada tiene que ver con el anterior Alcalde, que su 50% de liberación lo asumió el presupuesto de la Mancomunidad Cuenca Minera, así que nos va a costar a las arcas municipales la friolera de 47.100 euros anuales, y aunque no lo sea, pero por los hechos relatados, parece como si fuera una salida laboral con ambición económica para Marcos de IULV-CA, el ser Alcalde de Zalamea la Real.
Otro reciente incumplimiento de promesas electorales lo centramos en la no renovación de los trabajadores de “encargado de obras, auxiliar de biblioteca y técnico aparejador”, por lo tanto 3 puestos de trabajos menos en tan solo 15 días de mandato. Aunque es cierto que el puesto de encargado de obras lo han cubierto rápidamente y de qué manera, esto sí que es “desastre municipal” en el reparto del trabajo. Porque se han llenado y se siguen llenando “la boca de palabras vacías” cuando hablan y escriben sobre honradez, transparencia y quitar el enchufismo. Lo primero que hacen es contratar a dedo a un nuevo encargado de obras saltándose a la torera toda la legalidad vigente de la intervención municipal y del Servicio Andaluz de Empleo. Esta forma de proceder tiene visos de vendetta, cambiar por cambiar, el puesto se mantiene, la categoría también, el horario es igual y solo se intenta sustituir a la persona, atacando sin escrúpulos a un trabajador que cumple sobradamente sus obligaciones. A eso se le llama entrar pisando fuerte y cumplir con lo prometido.
Todo esto ha sucedido mientras se convocaba a los parados de las diferentes categorías, en distintas reuniones para redactar unas bases que aún no han visto la luz, por que contienen tantas irregularidades, que los técnicos no le han dado su aprobación, por no ajustarse a la legalidad, por lo tanto, estaremos atentos a las próximas contrataciones y a las llamadas bolsas de desempleados para ver si se ajustan y cumplen con lo ofrecido.
